¿Y entonces, qué pasa con las relaciones sexuales ajustadas al día de la ovulación?
Por todo lo descrito en nuestro anterior post del sexo fértil, el sincronizar las relaciones sexuales, sólo a los días de la ovulación, es limitar todo el potencial de concepción que tiene diseñado la Naturaleza a través de la sexualidad placentera.
Además la sexualidad es una función espontánea que parte de nuestro cerebro instintivo y no se puede controlar con nuestra parte intelectual.
De hecho para tener un orgasmo es importante dejarse fluir y no pensar en nada racional. Por eso, hacer el amor los días de la ovulación, de forma rutinaria, porque toca y porque hay que hacerlo, puede ser un factor negativo para la libido, para el flujo hormonal y por lo tanto no favorecer la fertilidad.
Como ya hemos visto, para un sexo pleno, placentero y fértil, es esencial la sensualidad, la espontaneidad y el verdadero deseo. Por ello, la mejor recomendación respecto a la sexualidad es:
Re-enamórate de tu pareja, re-enamoraros y volver a disfrutar de ese amor, de esa pasión, de esa sexualidad que os une. Y volver a hacer el amor por vosotros, no sólo por la búsqueda de un embarazo.
¡Tener siempre presente que va a ser vuestro amor el que va a hacer que este bebé llegue!
Se comprende que la búsqueda del embarazo que se hace esperar, es una experiencia agotadora, y es normal que tras años de espera, la pareja llegue muy estresada y debilitada, y esto afecta muchísimo a su amor y a su sexualidad.
Junto con todo esto, el sexo rutinario los días de la ovulación, agrava aún más las dificultades de la relación de pareja. Por ello recordaros que desde Fertilidad Natural os ofrecemos recursos de apoyo psicológico y de sexología de la pareja, con nuestras profesionales expertas, para ayudaros a ese re-encuentro de los amantes que sois.